Para
hablar de sindicalismo en Colombia es de vital importancia entender su
Génesis principalmente en el contexto latinoamericano, en el cual dadas
las especificidades históricas, sociales y culturales de la región, la
organización sindical surge de forma diferente al resto del mundo y
responde también a otro tipo de necesidades de los trabajadores, propias
de América Latina.
Como
sabemos a partir del siglo XVIII con el inicio de la Revolución
Industrial y la explotación exacerbada de la fuerza de trabajo, los
trabajadores percibieron que la mejor salida para garantizar condiciones
dignas de trabajo sería a través de una coalición de fuerzas y una
lucha organizada en contra del sistema dominante. Lógicamente durante
mucho tiempo fueron reprimidos y existieron muchos intentos por diversas
vías de romper con la movilización social. Sin embargo, los
trabajadores lograron mantenerse y poco a poco fueron ganando en sus
demandas, principalmente debido a la presión hacia el Estado para crear
legislaciones de protección y regulación del trabajo.
Con el tiempo la experiencia europea se extendió en el mundo y América Latina no fue la excepción. El sindicalismo comenzó garantizando el derecho a la organización y se amplió con el derecho a la libertad. Sin embargo, en el caso de nuestra región, la falta de legislación y débil legislación existente, además de intereses políticos y económicos de particulares o pequeños grupos, generaron la ineficacia en la garantía de estos dos derechos.
La implantación de un modelo capitalista en el que prevalecen los intereses de los particulares ha propiciado un abandono de los Estados en la protección de los derechos laborales, contrario o lo que se supone debería suceder, que es la existencia de una estrecha relación entre sindicatos y Estado, ya que los primeros cumplen también un papel político, en el cual es posible a partir de su experiencia crear agendas que sean contempladas en materia de legislación laboral.
De otra parte, los conflictos políticos, dictaduras, guerras internas, etc., que se han presentado en varios países de Latinoamérica han impedido cambios sustanciales en las políticas y han afectado la capacidad de movilización y organización de los trabajadores. Compete a los gobiernos comenzar a transformar las políticas respondiendo a las necesidades de los trabajadores y los cambios actuales del mercado.
Bibliografía consultada
Cuevas, Alberto (1990), Sindicato y poder en América Latina. Modelos y tendencias
del sindicalismo latinoamericano, Alianza Editorial, Madrid.
Taddei, Emilio H. (2000), Prologo en Enrique de la Garza (comp.), Reestructuración
productiva, mercado de trabajo y sindicatos en América Latina, Clacso, Argentina,
pp. 7-10.
Zapata, Francisco (1995), Reestructuración productiva en América Latina: ¿con o sin la
presencia de los sindicatos? en Portella de Castro Ma. Silvia y Achim Wachendorfer
(coords.), Sindicalismo Latinoamericano, - (Brasil) y Nueva Sociedad.
del sindicalismo latinoamericano, Alianza Editorial, Madrid.
Taddei, Emilio H. (2000), Prologo en Enrique de la Garza (comp.), Reestructuración
productiva, mercado de trabajo y sindicatos en América Latina, Clacso, Argentina,
pp. 7-10.
Zapata, Francisco (1995), Reestructuración productiva en América Latina: ¿con o sin la
presencia de los sindicatos? en Portella de Castro Ma. Silvia y Achim Wachendorfer
(coords.), Sindicalismo Latinoamericano, - (Brasil) y Nueva Sociedad.